Lista de dones espirituales según la biblia. 7 Versículos para saber usarlos

La lista de dones espirituales nos permite saber las habilidades especiales que Dios nos regala para así edificar a la iglesia y glorificar el nombre de Cristo. Estos deben usarse para bendecirnos los unos a otros y así trabajar en beneficio de la obra de nuestro Padre.

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En este sentido, todos los creyentes poseemos al menos un don y el Espíritu Santo reparte esos dones de acuerdo a su propósito para cada uno de nosotros. Tal como lo expresa su palabra: “Todo esto lo hace un mismo y único Espíritu, quien reparte a cada uno según él lo determina” (1 Corintios 12:11).

Pero al respecto la Biblia además nos motiva a desear otros dones y pedírselos al Señor, ya que él escucha nuestras peticiones:  “Procurad, pues, los dones mejores. Mas yo os muestro un camino aun más excelente” (1 Corintios 12:31)

Lista de dones espirituales. 3 Categorías importantes a considerar

 Uno de los grupos de dones otorgados por Dios poseen la clave para comprender muchos aspectos acerca de nosotros mismos, tales como nuestros pensamientos, las obras que hacemos, la relación que tenemos con los demás y las situaciones que nos rodean y que nos hacen ser la persona que somos actualmente como hijos de Dios. Al respecto la palabra nos habla acerca de estos dones:

 “Cada uno, según el don que ha recibido (un talento espiritual en particular, un legado divino), minístrelo a los demás, como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios. (Mayordomos fieles de la muy diversa capacidades y dones que Dios ha dado a los creyentes mediante su favor desmerecido.)”  (1 Pedro 4:10)

De esta manera Dios nos manifiesta que nos ha dado a cada uno de nosotros, un don. Pero también nos da el mandato de utilizarlo en beneficio de los demás. Ciertamente el Señor no nos va a mandar a usar algo que no tenemos. Pero la interrogante que se nos presenta es cómo puedo obtener los dones espirituales.

El término griego para "don" es carisma, la cual se define como algo que el Señor otorga de forma gratuita, es un regalo espiritual. De tal manera que esto no es algo que se pueda ganar. Sin embargo si lo podemos pedir.

Así que el don es algo que ya tenemos, es un regalo que el Señor nos dio a cada uno de nosotros cuando nos creó. Al respecto te mostraremos la lista de dones espirituales:

1.- Los Dones de Manifestación

    El primer grupo de dones de manifestación la podemos encontrar en 1 Corintios 12: “ Pero a cada uno le es dada por la manifestación del Espíritu, es decir, la evidencia, la iluminación espiritual  del Espíritu, para provecho. Porque a éste es dado por el Espíritu palabra de sabiduría; a otro, palabra de conocimiento según el mismo Espíritu a otro, fe por el mismo Espíritu; y a otro, dones de sanidades por el Espíritu; a otro, el hacer milagros; a otro profecía, es decir, el don de interpretar la voluntad y el propósito divinos; a otro, la habilidad de discernir y distinguir entre los espíritus de verdad, a otro, diversas lenguas; y a otro, la interpretación de lenguas” (1 Corintios 12:7-10)

En este sentido, existen nueve dones que se pueden apreciar en el versículo anterior:

• La palabra de sabiduría, que se refiere a una revelación que viene de lo alto.
• La palabra de conocimiento, que es una revelación acerca de alguien o algo que no se puede dar a conocer de forma natural.
• Nos proporciona Fe, aquella que mueve montañas y confía plenamente en Dios.
• Nos otorga el don de sanidad en el nombre del Señor.
• El don de hacer milagros, donde se revela el poder de Dios, rompiendo las leyes naturales y desafiando la ciencia.
• Profecía, el don de revelar e interpretar la voluntad de nuestro Padre.
• Discernimiento de espíritu, la capacidad de una persona para percibir el tipo de espíritu que está presente en una situación determinada.
• Nos dio el don de lenguas, otorgadas por el Espíritu Santo, las cuales no son entendidas por los demás, solo por aquel creyente que tenga el donde interpretación de lenguas.
• La Interpretación de lenguas, que es la habilidad sobrenatural de descifrar el contenido de lo que se ha dicho en lenguas.

2.- Los Dones Ministeriales

Otro de los dones que encontramos en la lista de dones espirituales son los referentes a los Ministerios. Esto se puede apreciar en Efesios 4: 11-13 “Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo, hasta que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo”

En este pasaje bíblico podemos notar la existencia de cinco dones:

• El apóstol, que es quien establece y se encarga de fortalecer las iglesias.
• El profeta, que se encarga de proclamar el mensaje de Dios.
• El evangelista está llamado a predicar el evangelio.
• El pastor, es quien pastorea a los cristianos, los guía y los orienta a hacer la voluntad del Señor.
• EL maestro, es quien instruye a los cristianos en la Palabra de Nuestro Padre.

Estos dones no son títulos que se otorgan sino funciones, ya que una persona no puede llegar a ser profeta debido a que alguien le dé el nombre de profeta; sino que se hace profeta cuando desarrolla ese don y responde al llamado de Dios y tiene un corazón dispuesto.

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3.- Los Dones Motivacionales

Este tipo de dones lo podemos ver en el Nuevo Testamento, en el libro de Romanos: “De manera que, teniendo diferentes dones según la gracia que nos es dada, usémoslos: El que tiene el don de profecía, conforme a la medida de fe; de servicio, que se dedique a servir, el que enseña, que se dedique a la enseñanza;  el que exhorta que se dedique a la exhortación; el que reparte, que lo haga con sencillez de corazón y liberalidad; el que preside, que presida con solicitud, de todo corazón; el que hace misericordia, que lo haga con verdadera alegría y entusiasmo” (Romanos 12:6-8)

Este tipo de dones nos anima a usarlos en beneficio de los demás, y para su gloria, haciendo así la buena voluntad de Dios de ayudar a nuestro prójimo en todo momento. De la misma forma que los demás dones, Dios nos los otorga por gracia, aún sin merecerlo, ya que es algo que no se gana, solo se da para glorificar al Señor porque nos ama y éstos nos ayudan a moldear nuestra personalidad.

De esta manera, Dios nos ha dado los dones para que los usemos en beneficio de nuestro prójimo y gracias al libre albedrío podemos tomar la decisión de usar estos dones motivacionales de manera correcta o hacerlo para nuestra vanagloria. Lo cual es un error en el cual podemos caer, a veces sin darnos cuenta, ya que pensamos que es por nuestros propios medios que los tenemos.

En este sentido, para poder tener la certeza de cuáles dones vamos a usar conforme a la voluntad de Dios, es fundamental comprender de qué manera funcionan. Dentro de este tipo de dones motivacionales encontramos los siguientes:

• El don de percepción el que tiene la capacidad de percibir de forma clara la voluntad de Dios.
• El don de servicio es quien disfruta el ayudar a los demás.
• El don de enseñanza, lo tiene el maestro, quien se goza en la instrucción.
• La exhortación es el don de animar a los demás para que tengan una vida plena como cristianos.
• Don de dar, es quien disfruta de compartir aquello que tiene para beneficiar a su prójimo. También es conocido como el contribuidor.
• El que posee el don de administrador, dirige y lideriza.
• El don de compasión es quien tiene misericordia, y se preocupa por los necesitados y les muestra compasión y amor.

Los dones espirituales y el contexto

Resulta de gran relevancia resaltar el contexto a la hora de tener conocimientos acerca de los dones espirituales que nos enseña la biblia. Tal como el siguiente pasaje:

“Así nosotros, siendo muchos, somos un cuerpo en Cristo, y todos miembros los unos de los otros. De manera que, teniendo diferentes dones, según la gracia que nos es dada, si el de profecía, úsese conforme a la medida de la fe; o si de servicio, en servir; o el que enseña, en la enseñanza; el que exhorta, en la exhortación; el que reparte, con liberalidad; el que preside, con solicitud; el que hace misericordia, con alegría. El amor sea sin fingimiento. Aborreced lo malo, seguid lo bueno” (Romanos 12:5-9)

De esta manera somos un solo cuerpo en Cristo Jesús y cada miembro es importante, ya que se complementan a través de los dones que se les ha entregado según la voluntad de Dios. Dones llenos de gracia como un regalo divino que demuestra el gran amor que nos tiene.

De igual forma nos dice que cada quien debe usar sus dones para el servicio de los demás, para enaltecer al Señor, y hay que hacerlo con sinceridad y amor fraternal. También nos señala que debemos dejar lo malo y seguir lo bueno, lo que nos edifica.

De igual forma es importante destacar que para poner en práctica los dones espirituales debemos renovar y limpiar nuestra mente a través de la lectura de la palabra y la oración. En la medida en que hacemos esto estaremos creciendo espiritualmente y haciendo la voluntad de nuestro Padre.

Dentro de este contexto podemos visualizar la importancia de usar nuestros dones espirituales para la gloria de Dios, para enaltecerlo solo a él, ya que nos da este regalo maravilloso sin merecerlo, y con la disposición de beneficiar a sus hijos.

Los dones que Dios nos da son los que nos anima a seguir adelante en nuestro día a día, bendiciendo a nuestro prójimo y sirviendo al Señor como el lo demanda en su palabra. Ciertamente nos sentiremos bendecidos al ayudar a los demás. Pero se debe ser muy cauteloso y pedirle la dirección a Dios a la hora de usar estos dones, ya que en muchos casos no son bien canalizados y así nos podremos sentir algo frustrados. Sin embargo en la medida en que los vamos descubriendo, se nos abrirán muchas puertas y obtendremos un gran potencial para ser felices y aportar nuestro grano de arena a la obra de Dios.

7 Versículos sobre los dones espirituales

Es muy importante buscar siempre de Dios a través de su palabra y refugiarnos en su sabiduría que va más allá de la nuestra, y esta la podemos hallar en las Sagradas Escrituras, donde la verdad es revelada, mostrándonos el camino que debemos seguir para usar correctamente nuestros dones. Aquí siete versículos que te pueden ayudar:

 1.- 1 Corintios 12:4-6

“Ahora bien, hay diversidad de dones, pero el Espíritu es el mismo. Y hay diversidad de ministerios, pero el Señor es el mismo. Y hay diversidad de operaciones, pero es el mismo Dios el que hace todas las cosas en todos”

2.- Romanos 12:6-8

“Pero teniendo dones que difieren, según la gracia que nos ha sido dada, si el de profecía, en proporción a la fe; si el de servicio, en servir; o el que enseña, en la enseñanza; el que exhorta, en la exhortación; el que da, con liberalidad; el que dirige, con diligencia; el que muestra misericordia, con alegría”

3.- 1 Corintios 7:7-177

“Sin embargo, yo desearía que todos los hombres fueran como yo. No obstante, cada cual ha recibido de Dios su propio don, uno de una manera y otro de otra. A los solteros y a las viudas digo que es bueno para ellos si se quedan como yo. Pero si carecen de dominio propio, cásense; que mejor es casarse que quemarse”

4.- 1 Corintios 12:8-11

“Pues a uno le es dada palabra de sabiduría por el Espíritu; a otro, palabra de conocimiento según el mismo Espíritu; a otro, fe por el mismo Espíritu; a otro, dones de sanidad por el único Espíritu; a otro, poder de milagros; a otro, profecía; a otro, discernimiento de espíritus; a otro, clases de lenguas, y a otro, interpretación de lenguas”

5.- Efesios 4:11

“Y El dio a algunos apóstoles, a otros profetas, a otros evangelistas, a otros pastores y maestros”

6.- Hebreos 2:4

“Testificando Dios juntamente con ellos, tanto por señales como por prodigios, y por diversos milagros y por dones del Espíritu Santo según su propia voluntad”

7.- 1 Pedro 4:10-11

“Según cada uno ha recibido un don, úselo sirviéndoos los unos a los otros como buenos administradores de la multiforme gracia de Dios. El que habla, {que hable} conforme a las palabras de Dios; el que sirve, {que lo haga} por la fortaleza que Dios da, para que en todo Dios sea glorificado mediante Jesucristo, a quien pertenecen la gloria y el dominio por los siglos de los siglos. Amén"

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