El mensaje de la cruz. Análisis

El mensaje de la cruz nos muestra el sentido de la predicación de la palabra de Dios, la cual nos dignifica pero también nos humilla, ya que debemos a él toda la Gloria y toda la actitud de reverencia por haber ofrecido a su propio hijo en sacrificio para salvarnos.

Sin embargo, el mensaje de la cruz resulta ser una locura para aquellos que están perdidos, a diferencia de los que alcanzan la salvación, este mensaje representa el Poder de Dios. Así que este mensaje es motivo de tropiezo para los judíos, y resulta locura para los gentiles. Sin embargo para aquellos que han sido llamados por Dios, representa la sabiduría del Señor.

En la actualidad, las diferentes congregaciones han sustituido el mensaje de la cruz de la cruz por cualquier otro mensaje que edifican ni transforman verdaderamente a las personas, y no tienen sustancia ni hace posible los milagros, debido a que no poseen el verdadero poder y valor.

Por lo cual se debe retomar el mensaje de Cristo y el propósito de su venida a la tierra, y predicar sobre ese sacrificio perfecto que nos libera del pecado. Así que el único mensaje que revela el poder sobrenatural de Dios es el mensaje de la cruz.

El mensaje de la cruz y su propósito en la tierra

El mensaje de la cruz no es solamente una predicación teológica donde se proclama una noticia y se entrega un mensaje. Así que la predicación no consiste específicamente en transmitir ideas nuevas sino en relatar nuevamente una historia que se refiere a la de la gracia de Dios en nuestra salvación, y esperar que por esa revelación, Dios vuelva a hablar y se haga presente en nuestra vida.

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De esta manera, el verdadero sentido de la cruz es el sacrificio que Jesús hizo, entregándose por todos nosotros en un sacrificio perfecto. Así que la cruz de cristo presenta dos roles importantes para el hijo de Dios, y es tiempo de que la iglesia proclame el mensaje de la cruz, el cual debe ser el centro de toda predicación, ya que encierra el propósito de Jesús en la tierra, dejando ver la autoridad y majestad del Dios supremo, venciendo con esto el mal.

¿Qué representa la cruz de Cristo?

 Muchos filósofos realizan estudios de la cruz desde lo abstracto, pero el mensaje de la cruz de Cristo es un suceso real en la historia que permanece a través de la palabra. Así que no hay en el mundo otra solidez, y es una verdad absoluta que no se puede borrar.

Resulta ser el evento más substancial de la historia. Cuando no colocamos en primer lugar el mensaje de la cruz, nuestra fe se puede quebrantar, ya que el sacrificio de Cristo es el plan perfecto de Dios y debe ser el principio cristiano más relevante dentro de las predicaciones de los templos.

En este sentido, Jesús manifestó en la cruz la gracia sobrenatural del Todopoderoso, y esa gracia representa un regalo no merecido. Es la máxima manifestación eterna llena de poder, el cual nos proporciona la experiencia de ser y poder realizar aquello que no podemos hacer por nuestras propias fuerzas, ya que cuando andamos sin la gracia de nuestro Padre Celestial, podemos caer en tentaciones y perder la salvación.

La predicación y el reino de Dios

Cuando se trata de estudiar los aspectos de la predicación, se debe comenzar por analizar el Nuevo Testamento, donde Juan  el Bautista comenzó a predicar en el desierto: “En aquellos días vino Juan el Bautista predicando en el desierto de Judea, y diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos se ha acercado” (Mateo 3:1-2)

Jesucristo predicó el mismo mensaje y le mandó a sus doce discípulos a proclamar ese mensaje, y recorría los pueblos y aldeas, impartiendo sus enseñanzas en las sinagogas, anunciando el evangelio del Reino, y sanando a los enfermos.

De acuerdo al evangelio de Lucas, el Cristo Resucitado además enseñó a los discípulos por cuarenta días sobre el significado del reino de Dios y del propósito que tiene el proclamar ese Reino hasta el fin del mundo.

En este sentido, el tema central de los tres primeros evangelios es el mensaje de la cruz, la llegada del reino de Dios a través del sacrificio de Jesucristo.

A pesar de que el tema del Reino no es tan presente en Pablo y en el cuatro evangelio, por las diferentes circunstancias políticas y culturales de su propósito, continúa siendo muy relevante.

Por su parte, la labor misionera de Pablo se refiere a la de “andar predicando el reino de Dios” (Hch 20:25), y en la etapa final de su misión, estando preso en Roma, Pablo “predicaba el reino de Dios y enseñaba acerca del Señor Jesucristo” (Hch 28:31).

Y  Jesús mismo, anunciaba en su sermón profético, que “este evangelio del reino se predicará en todo el mundo” hasta el fin del mundo (Mt 24:14).

5 beneficios del mensaje de la cruz de Cristo en nuestra vida

Tener conocimientos sobre la revelación del propósito de la cruz es la clave para obtener sus beneficios que son la salvación y vida eterna.

Además si internalizamos el mensaje podremos caminar en rectitud, bajo la guía del Espíritu Santo. Dentro de los beneficios que podemos encontrar en este hermoso sacrificio son los siguientes:

1.- El mensaje de la cruz nos libra del viejo hombre

El término “viejo hombre” se refiere a la manera antigua que tenemos para actuar en nuestra vida cotidiana, es nuestra naturaleza pecaminosa, obtenida en el Génesis por Adam y Eva, tras haber comido del fruto prohibido. Esto se simplifica en la rebeldía propia del ser humano.

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Así que nosotros lamentablemente nacemos con esa condición rebelde, ya que fuimos engendrados y formados en iniquidad, y para poder vencer a ese hombre pecaminoso y rebelde, Dios mandó a su Hijo Unigénito para que se sacrifica por nosotros, y así poder ser perdonados.

Por lo cual Jesús dio su vida en la cruz por todos nosotros, para así liberarnos de la condición que tenemos de pecadores. Pero debemos creer en este mensaje de la cruz para poder transformarnos y dejar atrás al viejo hombre y a nuestra vieja vida, para nacer de nuevo en Cristo Jesús. Tal como lo podemos visualizar en la siguiente cita:

“Si en verdad le habéis oído, y habéis sido por él enseñados, conforme a la verdad que está en Jesús. En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad”(Efesios 7:21-24)

2.- El mensaje de la cruz nos libra del ego

 El ego pertenece a una parte del alma donde está  lo que “yo siento”, lo que “yo quiero” y aquello que “yo pienso”. La mayoría de las personas a quienes se les hace difícil recibir a Cristo, es debido a su propio ego, ya que tienen que apartarse de la seguridad social que siempre han tenido, alejarse del pecado y buscar tener una nueva vida, que no todos comprenden, lo cual puede dar pie al rechazo y soledad por ir en contra de todos.

3.- La liberación de la carne a través del mensaje de la cruz

Tal como lo dice la palabra de Dios: “Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día, y sígame” (Lucas 9:23), debemos negar los deseos carnales y entregarnos de corazón a una nueva vida con Cristo Jesús, para así alcanzar la salvación, que es el propósito del sacrificio.

En este sentido, la carne continuamente desea actuar de forma independiente de la voluntad de Dios, y para vivir en la carne, solamente debemos dejarnos guiar por nuestra propia voluntad. Pero, si usamos el poder sobrenatural de Dios sobre la carne, lograremos vivir siempre en victoria, sobrellevando las adversidades de la vida.

4.- La liberación del mundo mediante el mensaje de la cruz

Tal como lo expresa la siguiente cita bíblica, debemos liberarnos del mundo y entregarnos por completo al propósito de la cruz en nuestra vida: “Pero lejos esté de mí gloriarme, sino en la cruz de nuestro Señor Jesucristo, por quien el mundo me es crucificado a mí, y yo al mundo” (Gálatas 6:14)

La mayoría de los se encuentra siempre en una constante angustia debido a la sociedad y su sistema, por la rutina diaria, el estrés y cansancio. Pero la vida nos manda a no permitir que el mundo nos envuelva en su paradigma. Para evadir tal sistema, tenemos que eliminar la mentalidad terrenal y comenzar a renovar nuestra mente, para así tener los pensamientos de Dios, y hacer su perfecta voluntad.

Lo cual no significa que debemos estar aislados como ermitaños, ya que debemos estar en este mundo y hacer actividades, realizar tareas, estudiar, entre otras cosas. Pero debemos tener claro que Dios ama al mundo pero aborrece el pecado y el sistema corrupto.

Por lo cual nuestro deber es hacer la diferencia y ser esa luz  en medio de las oscuridad, no unirnos al sistema sino transformar el sistema, no ser parte del sistema, sino que el sistema sea parte de nosotros y se acerque al reino de Dios, a través del mensaje de la cruz, de la predicación de las buenas nuevas.

Lo cual es un reto en medio de una sociedad tan corrompida y embelesada por todo lo que ofrece el mundo, que son cosas banales delante del propósito de Dios para nosotros.

5.- El mensaje de la cruz nos liberó del poder y autoridad de Satanás

En la siguiente cita bíblica podemos observar que el mensaje de la cruz tiene el propósito de apartarnos de toda autoridad de maldad:  “Y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz” (Colosenses 2:15)

El mensaje de la cruz, revela el triunfo de Jesús ante Satanás y sus huestes malignas, y no hay nada que él pueda hacer para cambiar o eliminar el sacrificio perfecto en la cruz, ya que es inalterable, pero si nos acercamos a Satanás, que es nuestro enemigo, en otro lugar que no sea la cruz vamos a ser vencidos.

Así que no debemos confiarnos y debemos ser firmes, ya que el enemigo siempre nos estará acechando porque sabe que mediante el mensaje de la cruz, somos salvos.

¿Qué cambios hizo el mensaje de la cruz de Cristo en nosotros?

El mensaje de Cruz revela lo que Dios hizo por nosotros y lo que produce en nosotros este hecho. En la actualidad no se proclama el verdadero mensaje de la cruz y su propósito divino, sino que existe una carencia de la comprensión en sí de este hecho.

Pero debemos enfocarnos y saber la verdad a través de la palabra, en la cual se nos habla claramente del propósito de Jesús en la tierra, de su sacrificio perfecto y resurrección, y no vamos a obtener los beneficios de la cruz al menos de que reconozcamos que el sacrificio fue diseñado solamente con la intensión de compensarnos y librarnos del pecado.

En este sentido, el símbolo de la cruz consiste en que Jesucristo tomó el lugar que nos correspondía como pecadores, y padeció  en carne propia todo el castigo que merecía nuestra desobediencia, y por eso recibimos todo lo fructífero que Jesús obtuvo por hacer la voluntad de Dios.

De esta manera que nuestra meta es llegar a ser semejantes a Cristo, ser como él, tal como lo demanda su palabra en Romanos 8:29 “Porque a los que de antemano conoció, también los predestinó a ser hechos conforme a la imagen de su Hijo, para que Él sea el primogénito entre muchos hermanos”

El mensaje de la cruz: Sabiduría y poder

Sin el poder de la cruz de Cristo podemos tener ciertas cualidades como creyentes, ser espirituales, tener buenos propósitos, predicar en la iglesia, entre otros. Pero no podremos transmitir el mensaje más importante de la cruz, y por eso no lograremos transformaciones en los corazones de las personas.

Por lo cual si queremos ver resultados verdaderos, debemos predicar sobre el propósito de la cruz, para así ver el poder sobrenatural de Dios revelado con señales y milagros.

En este sentido, Jesucristo se entregó en la cruz, resucitó y logró la victoria, con autoridad y poder, para tener la potestad y  encomendarnos el señorío que desencadenó en la cruz, y extender su ministerio en todo el mundo, difundiendo el mensaje de la cruz a todas las naciones, tal como lo demanda su palabra:

“Porque no me envió Cristo a bautizar, sino a predicar el Evangelio; no en sabiduría de palabras, para que no sea hecho vano el madero del Cristo” (1 Corintios 1:17)