Top 10 Versículos Sobre El Bautismo

Aquí te mostraremos algunos versículos sobre el bautismo. El bautismo es una de las principales señas de identidad de un cristiano. Jesucristo dio a Sus discípulos (es decir, cristianos) dos ordenanzas: el bautismo y la Cena del Señor (o comunión). Estos dos signos sirven como las marcas distintivas instituidas por Cristo del discipulado cristiano (Mateo 26: 26-29, 28: 18-20; Lucas 22: 14-20).

Pero, ¿quién debería ser bautizado? Algunos dicen que solo cristianos adultos, otros alegan que los cristianos adultos y sus niños pequeños deberían ser bautizados. Sin embargo, estos últimos no están en lo correcto, así que además de los versículos sobre el bautismo, te diremos las características del verdadero bautismo.

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Versículos sobre el bautismo

A continuación te entregamos una selección de algunos versículos que hablan sobre el bautismo:

1. Mateo 28:19

Id, pues, y haced discípulos en todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo.

2. Marcos 1: 4

Juan apareció, bautizando en el desierto y proclamando un bautismo de arrepentimiento para el perdón de los pecados.

3. Marcos 16:16

El que crea y sea bautizado, se salvará, pero el que no crea, será condenado.

4. 1 Corintios 12:13

Porque en un solo Espíritu todos fuimos bautizados en un cuerpo, judíos o griegos, esclavos o libres, y a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu.

5. Gálatas 3:27

Porque todos los que fueron bautizados en Cristo, se han revestido de Cristo.

6. Colosenses 2:12

Habiendo sido sepultados con él en el bautismo, en el cual también fuisteis resucitados con él por la fe en la obra poderosa de Dios, que lo resucitó de los muertos.

7. 1 Pedro 3:21

El bautismo, que corresponde a esto, te salva ahora, no como una remoción de la suciedad del cuerpo, sino como un llamado a Dios para una buena conciencia, mediante la resurrección de Jesucristo.

8. Mateo 3:11

Yo os bautizo en agua para arrepentimiento, pero el que viene en pos de mí es más poderoso que yo, cuyas sandalias no soy digno de llevar. Él los bautizará en Espíritu Santo y fuego.

9. Marcos 1: 8

Yo os he bautizado en agua, pero él os bautizará con Espíritu Santo.

10. Marcos 1: 9-10

En aquellos días Jesús vino de Nazaret de Galilea y fue bautizado por Juan en el Jordán. Y cuando salió del agua, inmediatamente vio que los cielos se abrían y el Espíritu descendía sobre él como una paloma.

Cuatro elementos indispensables del bautismo

Hemos conocido algunos de los más representativos versículos sobre el bautismo, pero también es importante saber de qué estamos hablando para tener una mejor comprensión. Por esto, es necesaria la explicación de las características fundamentales del bautismo verdadero.

Estos elementos son indispensables porque la eliminación de cualquiera de ellos indicará casi con certeza una redefinición del bautismo, que sería una pérdida del bautismo bíblico. En otras palabras, si uno o más elementos faltan en tu experiencia de “bautismo”, es muy probable que lo que sea que experimentaste no fue lo que Dios realmente ordenó.

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1. El verdadero bautismo ocurre después de que una persona se ha convertido

El mandamiento bíblico de ser bautizado es solo para aquellos que profesan fe en Jesucristo. Tanto en la comisión de Jesús como en la exhortación de Pedro, solo los “discípulos” o los que “se arrepienten y creen” deben ser bautizados.

Tal persona puede llegar a ser un confesor falso más adelante en la vida, pero se deben hacer grandes esfuerzos para asegurar que el bautismo se ofrezca solo a aquellos que al menos parecen estar creyendo en el evangelio y alejándose del pecado.

Mis hermanos presbiterianos y otros pueden argumentar que el mandato del bautismo también es para los hijos de los creyentes, ya que los niños se mencionan en Hechos 2:39.

Sin embargo, como lector notarás que es la promesa de salvación a través de Cristo y no el mandamiento de ser bautizados lo que se extiende a tus hijos y también a todos los que están lejos (Hechos 2: 39). Si alguien fue "bautizado" antes de convertirse, entonces ese "bautismo" no era cierto. Solo un bautismo posterior a la conversión puede ser verdadero.

2. El verdadero bautismo se realiza en el nombre de Jesucristo, quien es la cúspide de la revelación de Dios y el punto focal del evangelio

La observancia bíblica del bautismo asocia necesariamente al que está siendo bautizado con Jesucristo. Esta no es meramente una fórmula verbal en contra de los puntos de vista de algunos en la Iglesia de Cristo, sino una identificación mucho más completa con el Dios de la Biblia y la persona por quien Dios ofrece la salvación a los pecadores como nosotros.

En la comisión de Jesús, Él dice que los nuevos discípulos deben ser bautizados “en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo” (Mateo 28:19). Y Pedro exhorta a sus oyentes a ser bautizados “en el nombre de Jesucristo” (Hechos 2:38). La enseñanza de la Escritura en general es que el bautismo está indisolublemente conectado con el Padre, el Hijo y el Espíritu, y por ende, con el evangelio de salvación a través de la obra de Jesucristo.

Si alguien fue "bautizado" en asociación con cualquier religión no cristiana, cualquier evangelio falso, mensaje o grupo que niegue una doctrina esencial del cristianismo histórico, entonces ese "bautismo" no es válido. Solo un bautismo asociado con el evangelio bíblico, el Dios bíblico y el Salvador, puede ser verdadero.

3. El verdadero bautismo se experimenta como un acto consciente (tanto por parte del bautizado como por parte de los que observan) de confesar públicamente a Jesucristo como Señor y Salvador

El mandamiento bíblico de ser bautizado está necesariamente conectado con una profesión de fe pública y consciente, y una afirmación pública y consciente de esa profesión. Aquellos que están siendo bautizados están conscientes, y públicamente están dando a conocer su creencia en Cristo al mundo que mira.

Y aquellos que están observando y celebrando el bautismo están afirmando consciente y públicamente que el que está siendo bautizado es (hasta donde ellos saben) uno de ellos. Este elemento del verdadero bautismo se apoya en la realidad de que el bautismo no se puede llevar a cabo en secreto.

Nadie puede (bíblicamente) bautizarse a sí mismo. Además, tanto el bautizado como el que bautiza (así como otros cristianos observadores) deben ser participantes conscientes. Históricamente, el contexto normal para el verdadero bautismo es la iglesia local. Solo en los últimos años se ha descuidado esta práctica normativa.

La forma más fácil de demostrar esto es por el hecho de que la mayoría de las iglesias evangélicas todavía hoy tienen algunos miembros nuevos que se unen mediante el acto del bautismo. En muchas iglesias, esta es una práctica remanente de un tiempo pasado, sin mucha (si alguna) enseñanza o intencionalidad. Los nuevos conversos que se unían a la membresía de una iglesia al ser bautizados representaban la práctica común de la mayoría de las iglesias evangélicas.

Si alguien fue "bautizado" con la esperanza de que eventualmente se convertiría en cristiano, o si alguien fue "bautizado" cuando no entendió el significado básico del bautismo (como una profesión pública de fe cristiana y discipulado), entonces tal "bautismo" probablemente no sea verdadero. Solo un cristiano consciente puede ser bautizado como una afirmación pública de al menos otro cristiano consciente.

4. El verdadero bautismo se realiza mediante el uso de agua

La palabra βαπτιζω o baptidzō (traducida como "Yo bautizo"), que sirve como raíz de todas las demás palabras del Nuevo Testamento relacionadas con el acto del bautismo, lleva consigo el concepto de purificación, inmersión y lavado. Además, las descripciones que tenemos de los bautismos en la Biblia (particularmente los bautismos de Jesús y del funcionario etíope) parecen indicar una inmersión total.

Además de estos puntos iniciales, la imagen bíblica de estar asociado en o por el bautismo con la muerte y el entierro de Cristo solo se representa sumergiendo a alguien bajo el agua y luego sacándolo nuevamente (Romanos 6: 1-4). Las imágenes no se pueden representar simplemente vertiendo agua sobre una persona o sumergiéndola solo parcialmente en un poco de agua.

El bautismo debe llevarse a cabo sumergiendo completamente al bautizado. Si alguien fue "bautizado" sin agua, entonces ese "bautismo" probablemente no sea cierto. Si alguien fue bautizado por algún otro método que no sea la inmersión total, entonces vale la pena hacer más preguntas.

La pregunta de qué constituye un verdadero bautismo probablemente no sea una gran preocupación entre la mayoría de los feligreses, pero debería serlo. El bautismo es uno de los mandamientos más claros que Jesús haya dado a sus discípulos, y todo cristiano debe desear con entusiasmo obedecer a su Salvador y Rey.

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Pensamientos finales

Bueno, ahí te hemos dejado versículos sobre el bautismo y la explicación de cuál es el bautismo verdadero según las ordenanzas de Dios. Esperamos que este artículo sea de tu utilidad y logres evaluar tu propia experiencia. Recomendamos que hagas preguntas específicas sobre tu experiencia personal a tu pastor (s) o anciano (s).

La iglesia local fue diseñada por Cristo para ser la comunidad en la que trabajamos. También esperamos que muchos experimenten el verdadero bautismo, no simplemente para marcar una casilla ceremonial, sino como un acto consciente de obediencia a Cristo.